Una dorsal se despide de su eterno dueño, una historia que se deja atrás, una innumerable cantidad de participaciones con el conjunto merengue que ahora quedarán en puntos suspensivos, y quizá esta historia pueda tener una continuidad… pero por el momento un jugador se despide.
La historia de Raúl González Blanco en el Real Madrid comenzó con la temporada 1994/95, un equipo que consiguió la gloria de llevarse el torneo de Liga en base a los goles que combinaba junto a Iván Zamorano, disputando a finales de 1995 la UEFA Champions League donde marcó cuatro goles, tres de ellos frente al Ferencváros, y finalmente quedaría fuera ante el campeón Juventus FC en cuartos de final.
Su punto máximo en la Liga Española lo alcanzó en los años 2000, 2001 y 2002, donde sus goles ayudaron a llevarse la Liga Española (llevándose el trofeo Pichichi), la Supercopa de España, la Liga de Campeones UEFA (fue Máximo Goleador UEFA Champions 2000/01) y la Supercopa de Europa, siendo coronado inclusive con el Balón de Plata al segundo mejor jugador de Europa 2001, la Bota de Bronce 2001, y elegido como el Delantero del año UEFA 2000-01 entre otros galardones.
Participó en los mundiales Francia ‘98, Corea Japón 2002 y Alemania 2006 junto a la Selección Española, disputando en total unos 27 partidos y convirtiendo 20 goles, cifra que si bien es alentadora, no le permitió ser convocado en los últimos tiempos, lo que le llevó inclusive a modificar su celebración de gol (de besar su anillo de matrimonio, a señalar su dorsal con sus pulgares a modo de “protesta” por las no-convocatorias)
Comienza una nueva etapa para Raúl, quien ahora será el delantero del Schalke 04, llevándose sus goles y su historia a la Bundesliga, donde quizá sea el último club que lo vea jugar…