La época dorada, el auge, la cima, el tope de su carrera, distintas formas de llamar a una de las máximas glorias de Diego Armando Maradona fuera de lo que ha logrado en la Selección Argentina, haciendo que toda Italia coree su nombre y que el Nápoli que lo había contratado lo adopte como ídolo absoluto.
Recibido con honores, fue presentado en un estadio San Pablo de Nápoles completamente colmado por la afición, que recibía al nuevo ídolo que se había ido en malas formas del FC Barcelona, y que buscaba seguir demostrando en Europa todo lo que podía brindar.
Su primer partido en el Nápoli fue el 16 de Septiembre de 1984, ante el Verona, cayendo derrotados por 3 a 1, algo que se vio repetido en muchos encuentros donde el equipo no demostraba nada, alcanzando tan solo 9 puntos en la primera rueda de la Temporada 1984/85 de la Serie A.
Sin embargo, en la Segunda Rueda el equipo comenzó a funcionar, teniendo más protagonismo creativo Maradona, y logrando una seguidilla de victorias, consiguiendo 24 puntos más y dejando a Maradona como tercer goleador del Calcio.
En la Temporada 1985/86 el Nápoles se reforzó considerablemente, aportando entre otros jugadores a Bruno Giordano quien formó una perfecta sociedad con Diego Maradona, ayudando a alcanzar la tercera ubicación, y logrando un muy buen nivel futbolístico.
La Temporada 1986/87 tenía un atractivo especial, Maradona había sido el mejor jugador del Seleccionado Argentino Campeón en México ‘86, había convertido el mejor gol de la historia de los mundiales, y había demostrado con su fútbol que podía ejercer a la perfección el rol de conductor.
Esto se vio reflejado a la perfección en el campo de juego, donde no solo alcanzaron el primer Scudetto de la historia del Nápoli, sino que también alzaron la Copa de Italia 1986/87, teniendo principal protagonismo los goles que Maradona había convertido, asociándose a la perfección con Giordano.
A su buen juego se le sumó un socio fundamental, el brasileño Careca, quienes conformaron el recordado tridente ofensivo Mágica (Maradona, Giordano, Careca) y le aportaron un estilo único al equipo, que logró un excelente desempeño que se vio sorpresivamente mermado en las últimas fechas, pasando de conseguir el 87% de los puntos a quedar en un segundo puesto, a tres puntos del Milán, quien los derrotó en la fecha 29 en el San Paolo de Nápoles.
No obstante, ese equipo era una maravilla futbolística, y Maradona seguía haciendo de las suyas, entretener al público en los entretiempos haciendo malabares con el balón, tal como lo hacía en su infancia en Argentinos Juniors.
Con esta plantilla ya afianzada, encararon de la mejor manera posible la Temporada 1988/89, aunque esto no alcanzó para alcanzar la cima, quedando relegados a un segundo puesto detrás del Inter de Milán, aunque el protagonismo pasaba por el plano internacional.
En los días 3 y 17 de Mayo de 1989 se enfrentaron nada más y nada menos que al Stuttgart de Jürgen Klinsmann, con el motivo de la final de la UEFA Cup (actualmente, es la UEFA Europa League), logrando una victoria por 2 a 1 en el primer encuentro y un empate en tres goles para la vuelta, lo suficiente como para que un emocionado Diego Maradona levante el trofeo.
Preparándose para una época de reafirmaciones, llegó la Temporada 1989/90, la que devolvió la alegría al San Pablo de Nápoles consiguiendo un segundo Scudetto, reñido hasta las últimas instancias hasta el final, ya que faltando dos fechas se encontraban en igualdad de puntos con el Milán.
La anteúltima fecha dejó una victoria por 4 a 2 ante el Bologna, mientras que el Milan caía sorpresivamente ante el Verona por 2 a 1, dejando todo listo para que en la última fecha el Nápoli le gane cómodamente a la Lazio y alce luzca su segundo Scudetto.
Después del Mundial Italia 90 y la triste derrota de su Selección Argentina en la Final, comenzó finalmente la Temporada 1990/91, teniendo como primer logro alzar la SuperCopa de Italia 1990, y luego enfocándose en repetir el liderazgo de la Serie A.
Pero el 17 de Marzo de 1991, por la 25º Fecha y tras ganar por un gol al Bari, el ídolo de los napolitanos fue seleccionado para el control antidopaje, con un resultado que cayó como un balde de agua helada para la afición: Doping Positivo por Cocaína, y sancionado por quince meses, finalizando de la manera menos esperada su paso por Italia, aunque dejando un legado inolvidable y una canción en el corazón:
Estadisticas de Diego Armando Maradona en Nápoli:
- Temporada 1984/85 Serie A: 30 Partidos Jugados, 14 Goles
- Copa de Italia 1984/85: 6 Partidos Jugados, 3 Goles
- Temporada 1985/86 Serie A: 29 Partidos Jugados, 11 Goles
- Copa de Italia 1985/86: 2 Partidos Jugados, 2 Goles
- Temporada 1986/87 Serie A: 29 Partidos Jugados, 10 Goles
- Copa de Italia 1986/87: 10 Partidos Jugados, 7 Goles
- UEFA Cup 1986/87: 2 Partidos Jugados, 0 Goles
- Temporada 1987/88 Serie A: 28 Partidos Jugados, 15 Goles (Goleador)
- Copa de Italia 1987/88: 9 Partidos Jugados, 6 Goles (Goleador)
- UEFA European Cup 1987/88: 2 Partidos Jugados, 0 Goles
- Temporada 1988/89 Serie A: 26 Partidos Jugados, 9 Goles
- Copa de Italia 1988/89: 12 Partidos Jugados, 7 Goles
- UEFA Cup 1988/89: 12 Partidos Jugados, 3 Goles
- Temporada 1989/90 Serie A: 28 Partidos Jugados, 16 Goles
- Copa de Italia 1989/90: 3 Partidos Jugados, 2 Goles
- UEFA Cup 1989/90: 5 Partidos Jugados, 0 Goles
- Temporada 1990/91 Serie A: 18 Partidos Jugados, 6 Goles
- Copa de Italia 1990/91: 3 Partidos Jugados, 2 Goles
- UEFA European Cup 1990/91: 4 Partidos Jugados, 2 Goles
- SuperCopa de Italia 1990/91: 1 Partido Jugado, 0 Goles
Este ha sido el legado de Diego Armando Maradona en el Nápoli, ganándose para siempre el corazón de los Tifosi, alcanzando la cima absoluta del futbol mundial y demostrando gran parte de lo que ha llevado a concluir de que ha sido, sin lugar a dudas, uno de los mejores futbolistas de la historia.