Son buenos, son ricos y tienen éxito y mujeres. Los futbolistas, al menos aquellos que llegan al estrellato, son afortunados. Sin embargo, también es cierto que la carrera del futbolista es corta y que sus atributos físicos no duran toda la vida. Sobre todo para algunos. Y sino, compruébalo con los 6 futbolistas que más engordaron tras dejar el fútbol.
Ronaldo
Ah, Ronaldo. Uno de los mejores delanteros que ha dado la historia del fútbol mundial. Una vida plagada de éxitos, pero también de lesiones y de polémicas. Llegó un momento en que sus problemas con el sobrepeso fueron demasiado flagrantes. Su calidad siempre estuvo ahí, pero llegó a tener tal volumen corporal que se apuntó a un programa de TV donde su misión era conseguir adelgazar.
Adriano
Hay innumerables casos de jugadores brasileños que lo dan todo hasta que consiguen el éxito, y a partir de ese momento se dejan llevar y entran en una espiral de carnavales, fiestas y faltas de disciplina. A Adriano su buena época le duró muy poco, en el Inter. Después de ser considerado el mejor delantero del mundo, simplemente desapareció. Y nos referimos a que desapareció del panorama futbolístico, pues su masa corporal aumentó de tal manera que hubiese sido demasiado difícil hacerle desaparecer literalmente.
De Pedro
El ex jugador de la Real Sociedad tenía un guante en su pierna izquierda, incluso llegó a ocupar la banda izquierda de la selección española. Ahora, años después de haberse retirado, parece que ha dejado los centros en el campo para otros y que él prefiere los centros comerciales y de alimentación.
Thomas Brolin
Fue uno de los jugadores de moda a mediados de los 90. Incluso consiguió un tercer puesto memorable para Suecia en el mundial 94, acompañado de jugadores de la talla de Larsson, Kenneth Andersson o Martin Dahlin. Siempre fue una especie de Daniel el Travieso: rubio, gordito, y con una calidad y una mala idea endiabladas. Ahora es como si Daniel el Travieso se hubiera comido al Señor Wilson.
Maradona
El ‘Pelusa‘ nunca fue el jugador más estilizado del mundo, pero desde su retirada (y ya antes de eso) se ha convertido en un tipo gordo, sin más. Sin embargo, bastante peor que su obesidad es su falta de educación y saber estar cada vez que abre la boca. Dicho lo cual, ni quiere decir que no fuese un auténtico fenómeno de este deporte que tanto amamos.
Winston Bogarde
Winston Bogarde, uno de los peores defensores que ha pasado jamás por el FC Barcelona (y me atrevería a decir que uno de los peores jugadores que jamás haya pasado por algún club de élite), basaba todo su juego en su fuerza física y rapidez. Con la panza cervecera que tiene en la actualidad, digamos que estaría ni para jugar un partido de veteranos.
Paul Gascoigne
Incluimos a Paul Gascoigne en esta lista precisamente por todo lo contrario que reza el título. Paul Gascoigne no ganó peso tras retirarse del fútbol. De hecho, padeció este problema de sobrepeso durante la mayor parte de su etapa como (talentoso) jugador. Sin embargo, sus problemas con el alcohol han provocado que le hayamos visto en situaciones realmente lamentables, en un estado de salud muy preocupante y sin esos kilos de más con los que solíamos verlo. Gazza no ha engordado, lo suyo es mucho peor.
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