España por fin logró transmitir buenas sensaciones. Y fue en el momento en el que más las necesitaba. En cuartos de final, España arrolló a una Francia que había ganado todos sus partidos.
86-66, este es el balance final de un partido que pudo acabar de forma mucho más abultada si no fuera por un conato de relajamiento que tuvo la selección al comienzo del último cuarto. A Francia le pasó lo que a España en los Juegos Olímpicos de 2004, que ganó todos sus partidos de grupos y como premió le tocó jugar contra Estados Unidos. Todo salió bien para la selección española, que ya al final del primer cuarto ganaba de 10 (15-25).
Pau Gasol anotó 28 puntos, a pesar de que en el primero cuarto apenas anotó, demostrado quien es, hoy por hoy, prácticamente el mejor jugador europeo (siempre nos quedará Nowitzki por ahí), y Ricky Rubio calló la boca a propios y a extraños realizando un trabajo ejemplar ante Tony Parker, que se quedó seco con 6 puntos. Sin él, Francia no pudo demostrar la superioridad ofrecia a sus anteriores rivales. Un sueño que se les ha esfumado gracias a la mejor generación de jugadores que ha dado España.
Ahora queda esperar a conocer nuestro rival de semifinales. O Turquía, o Grecia. Algunos querrán la revancha contra los turcos, que acogerán el Mundial 2010, y nos ganarón hace una semana. A mí me es indiferente, jugando como ayer, no tenemos rival.
Originally posted 2009-09-18 07:07:05.