El pasado 26 de julio tuvo lugar la WWE Night of Champions, el evento anual por excelencia del Wrestling o lucha libre, esa que nunca nos cansamos de ver y que dio la fama al mismísimo Hulk Hogan hace ya cosa de 15 años o más.
La cita tuvo lugar en Philadelphia, en el Wachovia Center, pabellón de los Philadelphia Sixers, y en él se defendieron todos los campeonatos de la Liga WWE, que los profesionales del tema se encargan de defender que todo lo que sucede ahí es real. Es un espectáculo como pocos en el mundo. Imagínense todo el teatro, toda la preparación, todas las luces, la música, el ambiente. Vamos, es Yanquilandia, son expertos en estos trotes.
La mayor sorpresa que deparó a los espectadores fue la llegada del mismísimo Shaquille O’Neal al campo de batalla. De todos es sábida la afición de Shaquille O’Neal por cualquier tipo de evento que rebose de espectáculo. Ya le vimos también haciendo el canelo en Jackass, aquel programa de la MTV en el que un grupo de personas se hacían daño para disfrute de todos nosotros, pecadores.
Entre todos los combates, destacan en especial el de Jeff Hardy, que volvió a hacerse con el título de Campeón de los Pesos Pesados tras derrotar a CM Punk, que no tuvo ninguna oportunidad en ningún momento. Jeff Hardy se mostró agresivo, como la bestia que es, y tiró por la borda todas las aspiraciones de CM Punk, que llevaba toda la semana echando pestes de Hardy, diciendo que era imposible que perdiera ante alguien como él.
Originally posted 2009-07-28 13:46:59.