El narrador deportivo Andrés Montes, famoso estos últimos años por ser la voz de La Sexta en cualquier torneo que se jugara, ha sido encontrado muerto en su domicilio de Madrid a los 53 años de edad. Desde EspacioDeportes queremos darle nuestro pésame a la familia de tan especial comentarista y mejor persona.
Andrés Montes comenzó en esto del periodismo deportivo en los ochenta, pasando por la COPE, por Radio Televisión Española y después por Antena 3. Pero fue en Canal + cuando logró forjarse un nombre como comentarista de la NBA junto con un inseparable suyo, Antoni Daimiel, con quien pasaría largos años amenizando las madrugadas de los españoles que veían la NBA. La Liga de baloncesto americana siempre ha sido famosa por su espectáculo, su parafernalia y su juego atractivo, pero Adrés Montes consiguió mejorar eso, añadiéndole un toque informal, humorístico y, por qué no decirlo, pasional. Todos los motes que fue colocando a cada jugador (Air Jordan, ¿Por qué eres tan bueno McGrady?, El artículo 34, El cortacircuitos, La lengua más larga de la Liga, Tim Siglo XXI Dunca, El último emperador, Memorias de África…) quedarán en el recuerdo de los aficionados al baloncesto, igual que ahora conocemos a Calderón por ser Mr. Catering y sabemos que el éxito de los Gasol radica en las alcachofas de Sant Boi.
Digamos que Antoni Daimiel era la base de datos del baloncesto y Andrés Montes el que le hacía carburar. La etapa en la NBA llegó a su fin y fichó por una naciente La Sexta para retransmitir el Mundial de fútbol 2006 y también el Mundobasket 2006. Creó el nombre del Tiki – Taka, mientras se las apañaba para cambiarle el mote a Puyol. Ahora todo el mundo le llama Tiburón. El arquitecto, el dulce Iniesta, el auténtico queso manchego, Tom Cruise, Meter Saker, Sancho… Un sinfín de apodos que culminaban siempre con un «porque la vida puede ser maravillosa». Precisamente esas fueron las palabra que marcaron su despedida de La Sexta y, a la postre, sus últimas palabras escuchadas en vida por el común de los ciudadanos.
Desde aquí sólo puedo darle las gracias a Andrés Montes por haberme sacado tantas sonrisas durante estos años. Hay quien no apreciaba su forma de narrar los partidos, pero a mí me encantaba. Para ver lo que está pasando, ya tenía mis ojos. Me cuesta creer que ya nunca vaya a volver a escuchar un:
¿¡Pero qué me dices, Saliiiiiinas!?
Descanse en Paz.
Originally posted 2009-10-17 11:11:42.