Mala jornada de Champions League para los equipos españoles ayer. El Real Madrid se enfrentaba a un AC Milán en horas bajas en el Santiago Bernabéu, y mira por donde salió esquilado, mientras el Atlético de Madrid vio como el Oporto le metía un gol tras otro. Una jornada para olvidar.
El partido del Santiago Bernabéu era especial, sobre todo para el astro brasileño Kaká, que se enfrentaba a su ex equipo y todo parecía dispuesto para que saliera bien. Total, el Real Madrid nunca había perdido en su fortín ante la escuadra italiana.
Y eso que el Real Madrid comenzó ganando al primer cuarto de hora de juego, con un gol marca de la casa de Raúl, de esos de estar en el momento correcto en el lugar adecuado (algunos dicen suerte, otros lo llamamos saber estar). Así acabó la primera parte, con el resultado al 1-0 y los equipos jugando un fúbol para nada vistoso. Tal vez Ronaldinho hubiera salido también ayer de fiesta.
Pero si se los llevó, hubo dos jugadores que no se apuntaron. Pirlo y Pato. Primero uno y después otro, en poco tiempo, le dieron la vuelta al marcador y la afición blanca se echaba las manos la cabeza mientras decía: «Otra vez, nos la han liado». Y, pese a que Drenthe, que se ha hecho más o menos bueno, empató, y el árbitro anuló un gol al Milán, Pato metió el segundo y para casa. Lo que estaba programado para que el Real Madrid tuviera la clasificación a tiro de piedra, se volvió en su contra y ahora es segundo de grupo tras la escuadra milanesa.
Pero si el Real Madrid salió esquilado, lo del Atlético no tiene nombre. Con unos números en Liga peores que los del año cuando bajó (con la mejor plantilla de todo el mundo, o eso dicen), el Atlético no ha conseguido meter un gol en toda la Champions, y a este paso se despide de Europa sin conseguirlo. Ni que decir tiene que ya no depende de su mismo, pero que el Apoel Nicosia vaya por delante de él es sinónimo de que Abel, el mismo que rescató al equipo la temporada pasada, no está haciendo las cosas bien. O los jugadores, pero por regla general es más fácil deshacerse del entrenador. Ayer ya dijo que no pensaba dimitir, que eso es de cobardes, y no logro recordar a un entrenador que diciendo eso, no haya sido cesado. 4-0. Cuatro goles para que se fueran calentitos de vuelta a la capital. ¿Se clasificará el Atlético de Madrid? Desgraciadamente, todo indica a que no. El Chelsea lleva 9 puntos y el Oporto 6. El Atlético, 1. Aunque bueno, si consiguen ganar los otros tres partidos, todo es posible.